REGLAS PARA COMPARTIR EL MATE
El compartir el mate es uno de los símbolos sudamericanos de comunicación. Esta costumbre es bien hogareña en Argentina, aunque se ha popularizado, y actualmente se usan termos para trasladarse con el equipo de mate, para tomarlo en cualquier lugar u ocasión.
La rueda de mate es el grupo de personas que comparte una reunión amenizada por el mate. El amargo proviene de la rueda del fogón y el dulce es característico de la cocina de la estancia o la casa colonial. Allí había siempre una criada dedicada a deleitar a los patrones o agasajar a las visitas con un mate.
La rueda refiere al ordenamiento asignado por el cebador a cada uno de los participantes para mantener una distribución equitativa del mate. El objetivo es que el que acaba de tomar el mate no vuelva a hacerlo hasta que haya recibido el suyo cada uno de los demás integrantes. Cuando la reunión es numerosa, para no hacer tan larga la espera entre un mate y otro, suele haber más de un mate e incluso más de un cebador. Es frecuente que haya una opción dulce y otra amarga.
A continuación, las Reglas para Compartir
el Mate, extractadas de www.mundomatero.com
1. No pida azúcar.
Mucha gente está acostumbrada a usar azúcar en su café
o té, y es perfectamente correcto el pedir por ella. Mucha gente
también toma mate con azúcar. Pero cuando Ud. es invitado
a una mateada, puede cometer el mayor sacrilegio imaginable por pedir
azúcar.
2. No diga que el mate es antihigiénico.
Ud. puede pensar que es antihigiénico el poner su boca donde
los demás ponen la suyas. Por supuesto que lo es, pero eso es
precisamente la experiencia íntima de una mateada. La oferta
de compartir algo tan íntimo es el honor más alto. Si
Ud. no quiere ser tan íntimo con alguien, no comparta el mate
con ellos. Si desea compartir entonces una mateada, no diga nada sobre
la higiene.
3. No diga que el mate está muy caliente.
Si todos los demás están contentos con la temperatura
del mate, se consideraría de mala educación el pedir que
lo enfríen o el esperar hasta que se enfríe.
4. No deje el mate a medio tomar.
A pesar de la similidad entre el Mate y la pipa de la paz, hay algunas
diferencias básicas. Mientras que cada uno toma una pitada de
la pipa y la pasa, nunca haga eso con el mate. Ud. debe tomar toda el
agua hasta que escuche el sonido que señala que el mate está
vacío. Vea la regla siguiente.
5. No sienta vergüenza del ruido al final.
Si, después de chupar, Ud. escucha el mate "roncando",
no se sienta avergonzado. Es normal, nadie lo va a mirar como un maleducado.
Es lo que se debe hacer.
6. No revuelva el mate.
El mate se puede tapar de vez en cuando por si mismo, por la yerba o
por el que preparó el Mate. Si pasa, Ud. tiene todo el derecho
a quejarse.
Pero, por favor no revuelva el mate. Hable con quién le ofreció
el mate, o al que le pasó el mate a Ud. Pero no revuelva el mate,
y, ante todo no toque la bombilla con sus dedos.
7. No cambie el orden.
Una mateada da la vuelta como el reloj. El mate pasa de mano en mano
siempre en el mismo orden. Si Ud. está siendo servido pase el
mate al cebador.
Si hay gente cebando con su propia agua, que sucede en algunos lugares,
siempre paselo a la siguiente persona, sin cambiar el orden.
8. No atrase el ritmo.
Tomar el mate solo es una excelente manera para meditar sobre las cosas
de su vida. Ud. lo toma despacio, pensando acerca de cualquier cosa
que le pasa por la mente. El tomar mate en una mateada es completamente
diferente. La esencia no es la meditación sino la integración.
En una mateada, Ud. habla, discute, ríe, maldice, Ud. es parte
de la comunidad; es una hermandad. No se olvide de chupar, el resto
de la gente está esperando.
9. No condene al cebador por tomar el primer mate.
Si Ud. dice que el cebador es maleducado porque él o ella prepara
el mate y toma el primer mate, bueno, Ud. es el maleducado. La chupada
más fuerte es la primera, y quien la toma le hace un favor al
grupo.
10. No diga gracias antes de tiempo.
Se dice gracias sólo cuando uno ya no quiere seguir mateando.